La producción de los equipos de trabajo se diferencia en dos clases; los equipos pasivos, que son muy pobres en resultados colectivos, y los equipos dinámicos que se caracterizan por tener una mayor producción en sus resultados, ¿Qué hace que un equipo sea lento o dinámico?
Todos los estudios sobre experiencias en equipos de trabajo, nos conducen a que existe una alta dependencia al líder del equipo, conseguir que los equipos funcionen es un reto para todo directivo. Los directivos que continuamente muestran sus quejas de la pasividad de su gente, de la falta de espíritu de equipo, o de resultados de su equipo, con esta actitud están demostrando, que les falta desarrollar su habilidad para conducir equipos. Formar y dirigir equipos, requiere de una mezcla de habilidad y estrategia.
Requisitos a tener en cuenta
El primer paso es construir realmente un equipo, que es algo muy diferente a reunir un grupo de personas y dar una serie de instrucciones para que ellos los cumplan, Cada uno de los miembros del nuevo equipo en formación debe desarrollarse más allá de su propia área de especialización de modo, que esté en condiciones de apreciar todos los aspectos del negocio y puede realizar una aportación efectiva a la toma de decisiones. La eficacia de los equipos se mide por su capacidad de contribución.
El problema: Las personas con frecuencia tienen dificultades para adaptarse al equipo, inevitablemente se aferran a sus puntos fuertes con el fin de proteger su posición y evitar cometer errores.
Permita que el equipo asuma riesgos
La dinámica de equipo consiste en explorar los riesgos que enfrenta cada iniciativa aceptando que no todas las decisiones del equipo van a ser acertadas, por tanto un equipo compartirá la meta y la responsabilidad de la estrategia desarrollada y de los resultados de sus decisiones.
La otra clave de la dinámica de equipo consiste en conseguir que confluyan los diferentes elementos claves; objetivos, personas y crecimiento, todos ellos deben integrarse para generar una sinergia en la organización.
Capacidades del equipo
Para que un equipo recién creado consiga verdaderamente impulsar y construir el crecimiento de la empresa debe poseer una dinámica que asegure una definición clara de la dirección a seguir y el mantenimiento del impulso inicial.
Los factores claves de ésta dinámica, son: los Objetivos, las personas y el crecimiento.
Un grupo es un conjunto de personas con sus propias particularidades y especializaciones y que habitualmente trabajan de forma aislada realizando tareas necesarias para conseguir los objetivos del grupo. En cambio, un equipo es una serie de personas con una combinación de capacidades y conocimientos que se complementan entre sí para alcanzar unos objetivos definidos. Esta combinación es la que permite que florezca el espíritu emprendedor e innovador del equipo.
El primer punto clave en la formación de un equipo es la calificación e idoneidad; a la hora de elegir a un miembro de equipo, hay que tener en cuenta tanto la calificación como la idoneidad. Cualquier empresa que se mueva en un entorno dinámico y muy competitivo requerirá de una gran cantidad de ideas innovadoras y creativas, que sólo una adecuada combinación de personas, responsabilidades y capacidades pueden aportar.
La idoneidad se refiere a las capacidades y actitudes que una persona tiene para cooperar, asumir riesgos, informar y ser responsable de la toma de decisiones. La eficacia del equipo será mayor cuanto mayor sea la idoneidad de sus miembros, aun cuando el nivel de calificación sea menor. La idoneidad garantiza que las personas seleccionadas serán capaces de trabajar juntas y éste es un factor decisivo para conseguir dinámica en los equipos.
El otro factor de la dinámica en los equipos es su crecimiento y desarrollo, en otras palabras se trata de asegurar que la información sea compartida y comprendida por todos, el proceso de toma de decisiones, las opiniones sean escuchadas, alentando cualquier aportación.
ideas innovadoras y creativas, que sólo una adecuada combinación de personas, responsabilidades y capacidades pueden aportar.
La idoneidad se refiere a las capacidades y actitudes que una persona tiene para cooperar, asumir riesgos, informar y ser responsable de la toma de decisiones. La eficacia del equipo será mayor cuando cuanto mayor sea la idoneidad de sus miembros, aun cuando el nivel de calificación sea menor. La idoneidad garantiza que las personas seleccionadas serán capaces de trabajar juntas y éste es un factor decisivo para conseguir dinámica en los equipos.
El otro factor de la dinámica en los equipos es su crecimiento y desarrollo, en otras palabras, se trata de asegurar que la información sea compartida y comprendida por todos, el proceso de toma de decisiones, las opiniones sean escuchadas, alentando cualquier aportación.